¡Nació, nació!

Hoy me voy a distanciar un poco del tono desenfadado que suele tener este blog, aunque solo sea para anunciar que este humilde servidor hoy se ha convertido en tio por quinta vez.Si sumáramos el tiempo que pasé en el hospital con cada previo sobrino y lo multiplicáramos por dos aun sería menor que lo que he estado con éste.Efectivamente, me ha tocado hacer de padre sustituto, menuda experiencia, dieciseis horas en el hospital viendo a mi pobre hermana pasar por todas las fases de contracciones hasta el mágico momento, para ella muy muy mágico, en que le han puesto la epidural.De verdad que los hombres no tenemos ni puta idea de lo que debe doler, oigan.Los pelos como escarpias se me han puesto al oir los gritos de una parturienta que estaba teniendo el crio sin anestesia (por no se qué razón).Finalmente después de muchas horas llegó a este mundo Fernando, me da a mi que tiene futuro como pirotécnico.He aquí una afoto del muchacho recién recién nacido.


PD:tomemos un minuto para reflexionar en las palabras del médico más sabio que ha pasado por la televisión, el doctor Joel Fleischman , acerca de las tres palabras necesarias para conseguir un parto sin dolor:¡QUIERO LA EPIDURAL!