Soy un janeita, como ya había dicho antes, así que era bastante difícil para mi resistir la tentación de ver la última adaptación de la novela Orgullo y Prejuicio de Jane Austen. Ya casi al principio me dije a mi mismo no podía ser, que Keira Knightley con su gesto de sonrisa (siempre el mismo da igual el papel que se trate) no podía ser una aceptable Elizabeth Bennet.Pero conforme avanza la trama y se ve el tono ligero que toma la película empieza uno a pasarlo por alto.Y es que el mayor problema que tendré siempre con este film es la comparación no con el libro sino con la miniserie de 1995. Todo en la última adaptación me ha hecho pensar en cómo se trató el mismo momento en la miniserie.
Pero para el normal de los mortales ésta será un entretenida película, divertida a ratos donde se cuenta el enamoramiento entre el señor orgulloso Darcy y la prejuiciosa señorita Elizabeth Bennet, algo que por cierto no se cortan un pelo en insinuar a base de miradas de refilón y planos cortos de ellos, algo que no debería ser evidente (aunque todo el mundo lo sepa) hasta la primera pedida de mano.
Para los curiosos he de decir que aparte de Keira Knightley tenemos a un interesante grupo de jóvenes actrices en los papeles de las otras hermanas Bennet, como Rosamund Pyke, para mi la mejor villana que he visto en mucho tiempo en la saga de James Bond(inolvidable Miranda Frost en traje de esgrima), o Jena Malone, protagonista de la genial película ¡Salvados! , una de la más acidas y feroces críticas que he tenido el placer de ver del fundamentalismo cristiano.
En resumen, dos horas de tiempo bien invertidas.
Ale
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